El C.B.Murcia no se vende.

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"El CB Murcia no se vende


Existe el peligro real de que el equipo de referencia en el baloncesto de nuestra región sea vendido y desaparezca. Por esa razón, los aficionados murcianos nos hemos unido para levantar la voz y pedir ayuda. Pedimos ayuda para evitar que se ponga fin a la vida de un club histórico, un equipo en el que muchas personas han depositado sus ilusiones desde hace más de 23 años. Pedimos ayuda para salvar a un club que nos ha dado grandes momentos, que ha traído a Murcia a grandes equipos y que nos ha permitido ver en acción a algunos de los mejores jugadores del mundo. Pedimos colaboración para no dejar morir a un club que creció mucho y muy deprisa, tanto que incluso fue la causa de que se construyera el Palacio de los Deportes en nuestra ciudad, una de las mejores instalaciones deportivas de España. Un club que ha sido motivo de orgullo para Murcia y los murcianos, que nos ha colmado de alegrías y a veces también de desilusiones, pero que siempre ha contado con el afecto, con el apoyo y con la ilusión sin límite de su gente. Un club en cuyo seno se han formado jugadores, cientos de niños y niñas que han aprendido los valores que transmite el deporte. Niños y niñas que han tenido un referente cercano, que han podido contemplar de cerca de sus ídolos, que han soñado con poder jugar como ellos algún día, aquí, en su tierra. El CB Murcia nos ha dado la posibilidad de ser felices, de asistir semana tras semana a uno de los mejores espectáculos deportivos que se han jugado en nuestra ciudad. No hace falta preguntarnos, sentimos a este club del mismo modo que aquellos que cantan el famoso “You’ll never walk alone”en Liverpool. Para nosotros sería una tragedia la desaparición del Club Baloncesto Murcia. Hasta ese punto es capaz de calar el deporte.




En los últimos días se están diciendo cosas que nos duelen profundamente, sobre todo cuando se usan como excusa para justificar una posible desaparición del CB Murcia. Se está despreciando a la masa social del equipo diciendo que su número es muy reducido, y eso no es cierto. Por supuesto, nos gustaría que el Palacio de los Deportes se llenara con la misma asiduidad con que lo hacía a mediados de los años 90, pero para aquellas personas que aún no lo sepan, hay que recordar que a día de hoy el CB Murcia es el segundo club deportivo de la región en asistencia media de espectadores, sólo superado por el Real Murcia. No hay equipo deportivo en nuestra región que pueda convocar de manera regular entre cuatro mil y seis mil personas cada semana. Similares cifras manejan otros equipos de la ACB como Girona, Barcelona o Gran Canaria. Si se pone como excusa la falta de público en los partidos de baloncesto, también habría que cuestionarse la existencia de otros clubes de Murcia que, por cierto, ostentan un gran palmarés y compiten al máximo nivel, como son ElPozo Murcia en fútbol-sala o el equipo femenino de voley. Tampoco tendrían sentido los equipos de fútbol de Segunda División B y Tercera, por ejemplo. Así pues, ya estamos cansados de que se nos menosprecie, porque para que el equipo se consolide y crezca necesita tiempo, un tiempo que ahora se le está negando.




PEDIMOS AYUDA:




A vosotros, los medios de comunicación: debéis ser conscientes de la importancia que tiene ser una ciudad de ACB. Debéis ser rigurosos con la información y darle al CB Murcia la cuota de atención que en justicia se merece, aunque sea a costa de las noticias intrascendentes relacionadas con el fútbol que tanto tiempo os ocupan. No se trata de desterrar al balompié, sino de prescindir de la paja que rellena hasta el hastío los espacios informativos del deporte para dar cabida a la actualidad del CB Murcia. Es muy difícil ser aficionado al baloncesto en Murcia, y si no aportáis vuestro grano de arena, si no habláis de nuestro deporte, si no dais a conocer este rico patrimonio deportivo que tenemos, nunca podremos despegar y estar entre los mejores. Os necesitamos.




A los empresarios murcianos: tienen que arrimar el hombro. Una empresa no es un organismo autosuficiente llegado del espacio. Las empresas nacen en la sociedad, viven de ella y para ella, y deberían contribuir a su progreso y bienestar reinvirtiendo parte de sus beneficios en aspectos como el deporte, al margen de cuestiones de imagen y publicidad. Así mejoramos todos y lo hacemos entre todos. Nuestras empresas tienen que echar un cable, y no permitir que el baloncesto deje de ser una realidad en Murcia para convertirse en un sueño que acabó.




A las autoridades, ayuntamiento y comunidad autónoma: Los ciudadanos no esperan de sus gobernantes que gasten el dinero público en concepto de subvenciones y se despreocupen del resto. Hay que trabajar y asegurar el futuro para que esto no vuelva a pasar nunca más. A Murcia le conviene tener un equipo de baloncesto en la ACB, lo necesita y lo merece. Por la buena imagen de la ciudad, por el movimiento económico que trae consigo, pero sobre todo por ser un referente para la juventud y por fomentar el deporte, con todos los valores positivos que ello conlleva. Es una cuestión de principios básicos. La ciudadanía debe exigir a sus gobernantes que velen por la permanencia de ciertos elementos que repercuten en el bien común, y cuya importancia no se puede medir en términos de rentabilidad económica: la cultura, el transporte público, la sanidad, la seguridad… y también el deporte. Pedimos ayuda al alcalde de Murcia, a su concejal de deportes y al consejero de cultura del gobierno autonómico, para que no quede en su gestión el recuerdo de la muerte del CB Murcia. Si eso pasara, la imagen de nuestra ciudad quedaría muy dañada ante el resto de España.




Para acabar este comunicado queremos echar la vista atrás: la afición murciana dejó pequeño el recién estrenado pabellón Príncipe de Asturias allá por 1985, en Tercera División, en los partidos de rivalidad regional contra Cartagena. Siguió dejándolo pequeño cuando jugaba en Primera División B, y como ya hemos dicho, provocó la construcción del nuevo pabellón. De nuevo, esa afición dejó pequeño el recién estrenado Palacio de los Deportes de Murcia entre 1994 y 1996. Siguió demostrando que es digna de esa instalación y del baloncesto de ACB. Por variadas razones, entre las que se encuentra la nefasta trayectoria deportiva del equipo entre 1997 y 2005, una parte del público murciano abandonó las gradas, pero sabemos que puede volver a llenarlas con un proyecto serio, seguro y consolidado. Para eso se necesita la colaboración de todos: de las autoridades, del sector privado y de los medios de comunicación. Hacen falta más alegrías, crear más ilusión. Hace falta más baloncesto, y sobre todo hace falta tiempo. El mismo tiempo que han tenido equipos que ahora son grandes, como Vitoria, Málaga, Badalona o Valencia. Todo en este mundo necesita su tiempo, y nos negamos a aceptar que el del Club Baloncesto Murcia se haya agotado."